Crea un refugio acogedor para este visitante invernal construyendo una caseta en tu jardín. Ayudarás a las poblaciones locales en peligro.
08.07.2021
Los erizos son criaturas de jardín fascinantes que hibernan durante todo el invierno, así que a finales de otoño salen buscando un hábitat seguro y protegido en el que se puedan sentir cómodos. Los montones de hojas, los troncos viejos y las ramas suelen ser buenos alojamientos naturales. Por eso, si ves una pequeña montaña de hojas en tu jardín a finales de año, no debes tocarla hasta la primavera: es posible que haya un erizo viviendo ahí. Ten especial cuidado al cortar y recortar setos, ya que los erizos son animales muy activos por la noche, pero les gusta pasar el día bajo los arbustos y setos.
Antes de que comience el invierno, ¿por qué no dedicar un tiempo extra en la preparación del jardín para el frío y habilitar varios puntos como refugio para los erizos? Puedes amontonar los recortes de césped y las hojas en un rincón de tu jardín para que puedan descansar sin que nada les moleste. Otra opción es seguir nuestras instrucciones y construir tú mismo una casa para erizos de madera. No es un proyecto demasiado complicado y resulta muy satisfactorio saber que estamos ayudando a proteger una especie autóctona en peligro.
Los erizos acumulan una capa de grasa para mantenerse durante la hibernación, por lo que necesitan mucha comida antes de que llegue el frío. Los erizos jóvenes y las hembras, en particular, pasan desde septiembre a diciembre buscando comida, aunque los erizos macho empiezan a hibernar ya en octubre.
Puedes ayudar a que los erizos ganen fuerza para el invierno proporcionándoles pequeñas cantidades de alimento para gatos y agua en tu jardín. Ten en cuenta que nunca debes darles leche, ya que les causa diarrea grave. No obstante, ten en cuenta que los alimentos que aportes deberán considerarse solo raciones de emergencia. Como cualquier otro animal salvaje, un erizo salvaje puede —y debe—, encontrar su propio alimento. Además, contar con un suministro constante de alimentos podría hacer que el erizo no hibernara.
Si tu casa para erizo casera está habitada por un erizo, podría darse la sorpresa de ver al erizo por los alrededores cuando debería estar hibernando, pero es normal que a veces se despierten e incluso se alejen de su refugio. Si ves algún erizo activo en invierno, comprueba si muestra algún signo de enfermedad u otros problemas (por ejemplo, lesiones o desnutrición) y ponte en contacto con un especialista si es así.
Hay legislación vigente que declara ilegal matar o capturar erizos e incluso los incluye en el listado de especies prioritarias en muchos países. Por lo tanto, merece la pena saber cómo cuidar de un erizo adecuadamente y, por lo general, deberías descartar meterlos en casa. Crear un hábitat natural y cómodo al aire libre es la mejor manera de apoyar a una población de erizos sana.
Entre las excepciones se incluyen erizos enfermos, heridos, desnutridos o con parásitos. Las crías de erizo abandonadas que parezcan tener un tamaño demasiado pequeño (menos de 500 gramos), también necesitarán ayuda a medida que se acerque el invierno. Debes ponerte en contacto con un experto o un veterinario especializado en animales silvestres para obtener asesoramiento.
Recuerda que los erizos son criaturas que viven al aire libre y ahí es donde se sienten como en casa. Solo deben vivir e hibernar en interiores en circunstancias excepcionales. La ayuda a la fauna silvestre debe hacerse con el objetivo de mantener a estos animales en su entorno natural.
En nuestra guía te explicamos cómo hacer una casa para erizos segura y cálida en pocos pasos.
Antes de empezar a construir tu casa, prepara los siguientes materiales y herramientas:
Puedes elegir entre construir tu refugio para erizos con una base o abierto por la parte inferior. Lo importante es que el erizo y el material de dentro se mantengan secos durante todo el invierno, de modo que si optas por suelo abierto, no coloques la caseta por debajo del nivel de suelo o en una zona húmeda. Colocála sobre una capa de gravilla o virutas de madera que tenga un aislamiento adicional.
Nuestras instrucciones te ayudarán a montar una casa para erizos con suelo abierto.
El uso de máquinas potentes en tus proyectos de bricolaje es divertido e incluye poder realizar tareas más exigente, lo cual es fantástico siempre que lleves ropa de protección eficaz y segura mientras trabajas. Utiliza siempre el equipo de protección individual cuando trabajes con la minisierra: gafas de seguridad, guantes y pantalón anticorte, etc. Encontrarás más información en el manual de instrucciones de tu máquina. Familiarízate con la máquina antes de utilizarla por primera vez y comprueba que se encuentra en perfecto estado antes de cada uso. Previa solicitud, en tu tienda especialista STIHL estarán encantados de preparar tu máquina antes de este primer uso, además de aconsejarte sobre los modelos y tallas de ropa de protección adecuados para el trabajo que vas a realizar. Recuerda que el equipo de protección individual no sustituye técnicas de trabajo seguras.
Puedes ponerte manos a la obra si ya tienes tus herramientas, materiales y equipos de seguridad preparados.
Transfiere todas las medidas de la casa para erizos a los listones de madera como se muestra en el diagrama. Sujeta la madera firmemente en la superficie de trabajo antes de utilizar la minisierra de batería para cortar los listones al tamaño deseado. Utiliza ambas manos para guiar la STIHL GTA 26 durante el corte.
Recorta la entrada en el panel frontal de la caseta.
Suaviza los cantos cortados con papel de lija, redondeándolos ligeramente. Así evitamos que puedan astillarse partes de la casa creando un peligro para el residente.
Marca los ángulos indicados en los paneles laterales y córtalos. Estas esquinas inclinadas permiten que la lluvia discurra por el tejado sin tocar ni mojar las paredes de la casa para erizos.
El refugio incluye una puerta interior que separa el espacio para dormir de la entrada. Esto mantiene al erizo protegido del frío, el viento y los depredadores naturales. La puerta oscilante también mantiene fuera a visitantes no deseados y permite que el erizo pueda entrar y salir fácilmente.
Es muy fácil hacerla. Corta una abertura en la pared interior y, a continuación, recorta la puerta un poco más para que quede espacio para colgarla de las hembrillas. Utiliza unos alicates para abrir los ojales de las dos hembrillas y atorníllalas en la parte superior de la abertura. Atornilla las otras dos hembrillas en la parte superior de la puerta oscilante y cuélgala en los ojales abiertos. Cierra de nuevo los ojales con los alicates.
Ahora puedes unir las paredes de la casa para erizos. La forma más rápida es utilizar tornillos para madera y un destornillador inalámbrico.
Para asegurarte de que el tejado del refugio para erizos no se deslice, clava dos listones de madera en el tablero tal y como se muestra en la imagen. Para proteger la caseta de la lluvia, coloca fieltro impermeable para cubierta en el tejado con unos clavos especiales para fieltro. Aplica aceite de linaza a la madera para proteger la estructura de las inclemencias del tiempo.
La paja es lo mejor que puedes poner dentro de tu nueva casa para erizos. Es un buen material de anidamiento, un excelente aislante y también se mantiene seco cuando llueve. Añade suficiente paja en la cámara para dormir para que tu invitado se acurruque en ella.
Las hojas y el heno también son un material adecuado; a los erizos les gusta usarlos para hacer un nido. Sin embargo, las hojas recogidas del exterior suelen están húmedas y acaban enmoheciéndose dentro de la caseta. Antes de que el erizo empiece la hibernación, es una buena idea comprobar el refugio y retirar cualquier material húmedo.
Lo ideal es colocar la casa para erizos que acabas de construir sobre un terreno elevado para evitar que entre agua en caso de fuertes lluvias o nieve. También es mejor evitar lugares con luz solar directa para que el animal pueda descansar bien y sea menos probable que salga de su hibernación demasiado pronto.
El mejor lugar para colocar una casa para erizos es la cara norte de tu casa, debajo de arbustos o árboles perennes o en un porche. La entrada debe colocarse de forma que no entre el viento ni la lluvia.
Cuando hayas colocado la casa en un lugar adecuado, cúbrela con hojas y ramas. Estos materiales añaden una capa exterior de protección y camuflan el refugio frente a animales curiosos.
¡Y este era el último paso! Tu nuevo refugio invernal está listo para dar la bienvenida a su primer invitado.