Las malas hierbas son molestas pero inevitables para los jardineros. Identificarlas correctamente te ayudará a enfrentarte a ellas de manera temprana.
15.07.2021
Tal vez hayas oído decir que una mala hierba es simplemente una planta que crece en el lugar equivocado y hay cierta verdad en esto. No existe una definición estricta de lo que es una mala hierba y muchas de las plantas a las que nos referimos como malas hierbas son muy valiosas como plantas silvestres o como indicadores en otros contextos. Por lo tanto, merece la pena identificar correctamente las plantas, por si descubrieras alguna ventaja sorprendente en estas intrusas de tu jardín.
Para los jardineros domésticos, el término "mala hierba" designa a esas plantas no deseadas que crecen en el jardín o en el césped. Son plantas silvestres que, por lo general, son extremadamente resistentes y se propagan rápidamente. Las malas hierbas más comunes también suelen resistir muy bien las temperaturas cálidas o frías, por eso a menudo parece imposible acabar con ellas por completo. Muchas malas hierbas depositan semillas, tallos rastreros y estolones que permanecen inactivos dentro de la tierra y que germinan rápidamente —incluso décadas después— cuando al excavar las acercamos a la superficie.
Las malas hierbas crecen de dos maneras: o bien se extienden por sus raíces o bien por sus semillas. Identificar el tipo de maleza de tu jardín te permitirá saber cómo se propaga y, por lo tanto, cómo eliminarla mejor.
Las resistentes raíces de estas malas hierbas pueden extenderse por el arriate o por debajo de la hierba. Los caminos y las vallas no las detienen: sus rizomas radiculares a veces tienen muchos metros de longitud y pueden extenderse por todo el jardín.
Al identificar las malas hierbas, es importante establecer los tipos de raíces y abordarlos adecuadamente. Triturar o cortar estas malas hierbas en trozos pequeños no las destruye y, de hecho, es probable que agrave el problema, ya que se crean muchos más puntos desde los que pueden volver a crecer. La única manera de deshacerse de estas malas hierbas de una vez por todas es sacarlas cuidadosamente de la tierra con sus raíces, preferiblemente, sin romperlas. Esta tarea es muy laboriosa, pero tiene la recompensa de disfrutar un césped sin intrusos.
Este tipo de mala hierba produce grandes cantidades de semillas, lo que significa que puede reproducirse rápidamente y a gran escala. El diente de león es un ejemplo clásico de maleza problemática que se extiende de esta manera. Cuando la flor madura, se convierte en esos inconfundibles molinillos ligeros que se distribuyen eficazmente con el viento.
Otra mala hierba habitual que produce semillas es la galinsoga de flor pequeña, la oreja de ratón y la celidonia mayor. La mayoría de estas plantas estacionales pueden reproducirse a grandes distancias y el material genético es capaz de sobrevivir durante años o incluso décadas en el suelo, antes de volver a germinar cuando removemos la tierra. Esto explica que surjan malas hierbas en arriates recién creados o césped nuevo.
El mejor enfoque a largo plazo para deshacerse de estas malas hierbas es debilitarlas eliminándolas y cortándolas repetidamente. La clave es atacarlas antes de que florezcan o, al menos, antes de que maduren las flores, ya que no tendrán oportunidad de reproducirse. No obstante, ten en cuenta que algunas malas hierbas de propagación por semillas, incluidos los dientes de león, también tienen raíces fuertes y pueden volver a salir a partir de las raíces que queden en el suelo. En el caso de estas malas hierbas, la solución a largo plazo pasa también por eliminar las raíces.
Porque, debido a su capacidad de recuperación y a la rapidez con la que pueden propagarse, compiten por los nutrientes, el agua y la luz con las plantas que cultivas o el césped de tu jardín. Así que, mientras que tus plantas perennes, arbustos y plantas ornamentales se han seleccionado cuidadosamente para crecer donde las condiciones son las adecuadas, las malas hierbas surgen y prosperan en cualquier sitio. Las variedades que eliges dependen del cuidado y del entorno adecuados para crecer, pero las malas hierbas son menos exigentes por lo que ganarán esta competición por los recursos. Además, también crecen con mayor rapidez, son más resilientes y pueden introducir enfermedades y atraer plagas. Por lo tanto, identificarlas es el primer paso para restablecer el equilibrio en tu jardín y, si se abordan de forma temprana, pueden eliminarse de forma permanente, sin utilizar productos químicos como herbicidas.
Cuanto mayor sea tu precisión a la hora de identificar las malas hierbas del césped y las jardineras de tu jardín, más eficaz será la solución para eliminarlas. Hemos enumerado algunos de los tipos de malas hierbas más comunes y las formas de eliminarlas.
Cómo se propaga: por las raíces
Características: trepa por otras plantas enrollándose a su alrededor. Es una planta muy agresiva a pesar de sus bonitas flores.
Daños: impide el crecimiento de otras plantas y las asfixia.
Cómo abordarla: utiliza una azada para cortar cualquier brote sobre el suelo o arráncalas tirando de ellas con la mano. Requiere mucha paciencia y tiempo deshacerse de esta mala hierba, ya que los finos rizomas son largos y difíciles de eliminar de la tierra. Sin embargo, si cortas esta malas hierba varias veces durante la temporada de jardinería, debilitarás poco a poco las raíces profundas y se acabarán agotando sus reservas.
Ventaja: sin beneficios
Cómo se propaga: por las raíces
Características: hay dos tipos de ortigas, la menor (urtica urens) y la mayor (urtica dioica). Ambas producen una sensación de escozor desagradable al entrar en contacto con la piel.
Daños: se propaga rápidamente con sus raíces y semillas.
Cómo abordarla: se pueden cortar con una desbrozadora. A continuación, utiliza una horquilla para soltar la tierra y sacar las raíces de la maleza para asegurarte de que no vuelvan a crecer. Ten en cuenta que una sola planta puede ocupar un área de un metro cuadrado.
Ventaja: los fertilizantes líquidos caseros a base de ortigas son ideales para fortalecer las plantas de cultivo y combatir plagas como el pulgón. Las ortigas también proporcionan un hábitat esencial para algunas especies de mariposas, ya que las orugas de la vanesa, la mariposa pavo real y la mariposa ortiguera se alimentan exclusivamente de ortigas.
Cómo se propaga: por semillas
Características: una mala hierba que prefiere los lugares soleados. Produce flores amarillas y blancas y grandes cantidades de semillas. Muere con la primera helada.
Daños: se extiende muy rápidamente y puede germinar el año siguiente. Compite con otras plantas para obtener luz, agua y nutrientes.
Cómo abordarla: elimínalas con la azada o desbrozando de forma regular. Lo ideal es hacerlo cuando todavía son jóvenes, para que no puedan florecer y madurar.
Ventaja: sin beneficios
Cómo se propaga: por raíces y semillas
Características: es una mala hierba perenne y persistente que produce muchas semillas y con raíces que se pueden regenerar. Crece hasta una altura de 80 centímetros. Se extiende rápidamente y no debe compostarse con semillas o raíces, ya que estas brotarán en el compost. Umbelas de flores de color blanco crema.
Daños: priva a otras plantas de nutrientes y espacio.
Cómo abordarla: levanta las malas hierbas de la tierra con una horquilla para extraerlas. Maleza persistente.
Ventaja: sin beneficios
Cómo se propaga: Root
Características: también conocida como bugalla, ranúnculo de prado y redellobas, esta mala hierba prospera en prados húmedos y en orillas y riberas. En entornos secos, las flores amarillas pueden convertirse en frutos secos, pero la mayor parte de su diseminación se produce por los tallos subterráneos. Esta planta prospera en tierras ácidas.
Daños: se extiende ampliamente y quita espacio a otras plantas. Puede ser especialmente problemática en céspedes, ya que evita el crecimiento de la hierba.
Cómo abordarla: dado que los botones de oro prefieren tierras ácidas, pulverizar cal para cambiar el pH puede reforzar el césped y debilitar la mala hierba. Cortar el césped con regularidad, especialmente durante el periodo de floración, también evita la formación de semillas. Sacarlas de la tierra es el método más eficaz a largo plazo. Arrancarlas de raíz es lo ideal, pero son grandes y puede resultar difícil, además de dejar agujeros en el césped.
Ventaja: en pequeñas cantidades, el botón de oro podría dejarse como un invitado en el jardín, ya que sus flores amarillas son un bonito añadido.
Existen varias formas de eliminar las malas hierbas. No deben compostarse si la planta ya ha florecido y madurado, ya que las semillas suelen sobrevivir al compostaje y pueden volver a germinar cuando se añade el compost al suelo.
Además, siempre debes compostar las raíces de las malas hierbas con cuidado. Empieza identificando qué malas hierbas se propagan a través de las raíces y no añadas estas raíces a tu compost.
En el caso de otras malas hierbas, asegúrate de cortar las raíces antes de compostar, de lo contrario, puede que añadas una mala hierba capaz de prosperar en tu compost. Las malas hierbas que han florecido también pueden producir semillas capaces de germinar, por lo que solo debes compostar las malas hierbas jóvenes que no hayan florecido.
Teniendo en cuenta estas advertencias, lo mejor que puedes hacer es compostar las malas hierbas, ya que se descomponen en nutrientes valiosos que resultarán útiles.
La mejor manera de eliminar grandes volúmenes de malas hierbas que no se pueden compostar es depositarlas, por ejemplo, en un centro de reciclaje o en una instalación local de recogida de residuos verdes. Puedes eliminar pequeñas cantidades de malas hierbas con los residuos orgánicos domésticos. Esto también se aplica a las raíces y malas hierbas que producen semillas, ya que garantiza que no puedan germinar ni brotar de nuevo.
Espacios respetuosos con las abejas: cuando las malas hierbas se convierten en buenas amigas
Ten en cuenta que, aunque puede que no queramos las malas hierbas de nuestro jardín, las abejas y otras criaturas agradecen la variedad que ofrecen. Muchas de las flores de estas malas hierbas son una buena fuente de néctar, así que plantéate dejar algunas de ellas en alguna zona aislada de tu jardín.